Ni las gestiones a político en el Congreso, ni los compromisos adquiridos y ni el viaje de una comitiva de alcaldes y legisladores a Santiago sirvieron para revertir un destino que estaba escrito desde que se ingresó el proyecto de ley de Presupuesto de la Nación para el 2026, y que sólo se ratificó la madrugada de este jueves con el despacho por parte de la Cámara Baja.

El Gobierno Regional del Biobío (Gore) tendrá para el próximo año un presupuesto de inversión de $117 mil millones, la mitad de lo solicitado inicialmente a la Dirección de Presupuestos ($225 mil millones) y un casi un 2% menos de lo asignado para el ejercicio 2025.

Con ello, en las oficinas de Avenida Prat ya comienzan a sacar las cuentas ante el reducido margen de libre disposición que tendrán los recursos del erario nacional, con miras a un ajuste de las expectativas: al momento de presentarse el proyecto de ley con miras al 2026, se manifestó desde el Gore que el 90% de los recursos ya estaban comprometidos entregando un escaso margen de gasto.

La propuesta inicial finalmente aprobada de $127 mil millones considera un aporte fiscal inicial de $75 mil millones además de $50 mil millones provenientes de transferencias para gastos de capital que principalmente están asignados desde el llamado Fondo Espejo del Transporte Público con $25 mil millones y del Fondo de Productividad y Desarrollo con $17 mil millones: a ese monto global se le descuentan poco más de $9 mil millones destinados a la operación del Gore Biobío, un monto que anualmente es considerado para esos fines.