En el primer estudio de opinión publicado tras las elecciones del domingo, la encuesta Panel Ciudadano-UDD entregó un resultado que reconfigura el escenario político de cara a la segunda vuelta presidencial. Según el sondeo, realizado entre las 21:30 horas del lunes y las 12:00 horas de este martes, José Antonio Kast aparece como el favorito con un 61% de preferencias, mientras que Jeannette Jara alcanza un 39%.

El levantamiento de datos se efectuó luego de que ambos candidatos aseguraran su paso al balotaje: Jara obtuvo un 26,8% de los votos en la primera vuelta, mientras Kast alcanzó el 23,9%, quedando a solo dos puntos de diferencia. Pese a esta cercanía inicial, la medición revela un escenario distinto al proyectar la segunda vuelta, otorgando una ventaja de 22 puntos al representante del Frente Social Republicano.

Amplias brechas por grupos etarios

El estudio también identificó diferencias significativas entre tramos de edad. Kast lidera de forma holgada entre los mayores de 30 años, mientras que Jara concentra mayor apoyo en votantes jóvenes, especialmente en el segmento de 18 a 29 años. No obstante, este respaldo no alcanza para revertir la tendencia general.

Metodología y contexto

La encuesta consideró una muestra de 1.095 casos efectivos a nivel nacional, con un margen de error aproximado de 3%. La rapidez con que se levantaron los datos permite captar las primeras percepciones ciudadanas tras el resultado electoral, ofreciendo una fotografía preliminar del escenario que se proyecta hacia el 14 de diciembre, fecha de la segunda vuelta.

Un panorama desafiante para ambos comandos

Los resultados dan un impulso político importante a Kast, quien entra a la recta final con una ventaja estadística clara. Para Jara, en cambio, el desafío será ampliar su base de apoyo y captar a los votantes de las otras candidaturas que quedaron fuera de competencia.

Con este primer sondeo post electoral, se abre una nueva etapa en la contienda presidencial, marcada por estrategias renovadas, búsqueda de adhesiones y un país que vuelve a dividirse en dos opciones para elegir a su próximo Presidente.